Los valores son una parte indisociable del concepto de educación. Un valor es una prioridad significativa en la vida de una persona. Para que una sociedad pueda mejorar debemos educar en valores, estos ayudan a los niños a conocerse a sí mismos y a ser mejores personas. No sirve de nada que una persona pueda ser excelente en lo que hace si, por ejemplo, trata mal a sus iguales o no sabe trabajar de cara al público. Asimismo, lo que buscan las empresas hoy en día es mucho trabajo cooperativo y esto lo conseguimos con los valores.
Actualmente, en muchos colegios confunden educar en valores con educar en prejuicios. Muchos educan con cuentos antiguos, con cuentos de hadas de hace más de 30 años y no saben que las cosas se han actualizado. Cuentos como la Cenicienta nos dan una imagen de la mujer anticuada, la mujer tiene que ser dulce, bella, rubia, trabajar en labores del hogar y casarse con un hermoso príncipe, nos da una imagen de la maldad que tienen las hermanastras y la madrastra contra Cenicienta la envidian por el simple hecho de ser hermosa lo que da una imagen de que entre las mujeres nos envidiamos, Cenicienta se queja y se queja pero no hace nada por reivindicarse, por cambiar su situación, y lo único que consigue este cuento es enseñarnos los contralores (los valores negativos). Después otro cuento típico es el Jorobado de Notre Dame, un cuento que nos demuestra que por muy noble, bondadoso, honesto y respetuoso que seas, si eres feo o si tienes problemas, ninguna mujer "hermosa" te va a aceptar y en cambio va a aceptar a cualquier otro aunque la trate mucho peor, esto da otra imagen de la mujer como la mala del cuento, y que decir NO está mal, a pesar de que está claro que no todo lo que pasa en el cuento en la vida real tiene que ser así y que un estereotipo de belleza define lo que nos tiene que gustar o no. Yo recuerdo que estos cuentos me los ponían en el colegio y estoy hablando de hace más de 10 años y todavía siguen poniéndolos.
Por eso, lo que debemos hacer es nutrir la interpretación que tiene cada niño sobre sí mismo y de la identidad en grupo basado en una información correcta y que le brinde seguridad. Debemos promover la interacción empática y el sentirse a gusto con la gente de orígenes diferentes para que aprendan a conocer otros puntos de vista y poder respetarlos, así como tratar a sus iguales como a lo que son, IGUALES. Sobretodo fomentar el pensamiento crítico de cada niño sobre el prejuicio para que comprendan cuánto puede llegar a lastimar el rechazo y lo que es justo y lo que no lo es, para que aprendan a defenderse a sí mismo y a los demás de los prejuicios.
Esto se consigue creando un ambiente en el que el niño pueda sentirse un miembro valioso del grupo, trabajando para combatir la discriminación e infundir identidades positivas en ellos, mientras forjamos su confianza y establecemos lazos con los padres. Debemos ayudar a los niños a aprender en forma respetuosa y eficaz sobre las diferencias dentro de un grupo, respetarlas y a relacionarse entre sí, hacerles ver que los prejuicios son injustos y que se puede hacer algo al respecto y a defender a los otros y a sí mismo.
El día 7 de noviembre hicimos una representación de varios valores, "El día del valor". Con el día del valor aprendí que se puede trabajar los valores de manera dinámica, mientras el niño se divierte y conoce los valores importantes para su vida. Me pareció una actividad muy positiva que podríamos aplicar un día con los niños en una clase de verdad.
Referencia APA:
García-Lago, Virginia. (2002). ¿Educamos en prejuicios o educamos en valores? Educación y futuro. Revista de investigación aplicada y experiencias educativas, 7, 8 pp. Disponible en: http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2016083
Referencia APA:
García-Lago, Virginia. (2002). ¿Educamos en prejuicios o educamos en valores? Educación y futuro. Revista de investigación aplicada y experiencias educativas, 7, 8 pp. Disponible en: http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2016083
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